miércoles, 21 de enero de 2009

La casa Hundertwasser

La habréis visto si habéis estado en Viena. Se llama así porque la levantó el pintor y arquitecto Friedensreich Hundertwasser por encargo de la administración austriaca: le encomendaron construir viviendas sociales y él hizo este edificio con cúpulas de cebolla para que sus habitantes vivieran "como reyes". Igualico que lo que se construye por aquí, ¿verdad?

La casa contiene cincuenta viviendas, de uno o dos pisos, algunas con jardín, y cada una de un color, enlazadas por una cinta de cerámica, de cinco kilómetros de longitud, que abraza todo el edificio.

Hundertwasser persigue "la tolerancia de la irregularidad": todas las esquinas del edificio son redondeadas y todas las ventanas, de distinto tamaño, anchura y altura. Los azulejos de los baños no son uniformes, el suelo de la galería es desigual y una de las paredes, ondulada. Esta pared se convierte, en su parte inferior, en una inmensa pizarra, de 500 metros de largo, para que las criaturas pintarrajeen y garabateen.

En Austria discuten sobre si esto es arte o kitsch. Como si no pudiera ser a la vez las dos cosas.

Technorati tags

17 comentarios:

39escalones dijo...

La belleza de la asimetría. No quiero ni pensar cómo será la escalera o el ascensor...
Dentro del apasionante mundo de las comunidades de vecinos ésta debe llevarse la palma.

Santy Trombone dijo...

Vamos, vamos... yo lo tengo muy claro el kitsch es un gran arte...

Anónimo dijo...

Si no viviese en una casa con huerta, no me disgustaría vivir en uno de esos pisos.

Antonio dijo...

¿Alquilan habitaciones?.

Lucía dijo...

Vaya, pues yo me mudaba ahora mismo, que ya se cansa una de ver estos edificios de clase obrera todos igualicos y bien sosos.
Y lo que más me gusta de la casa es esa pared ondulada. No se podría poner ningún mueble, pero me da igual. Me pasaría el día observando las sombras en sus ondulaciones.
Un abrazo.

Noemí Pastor dijo...

Hola, gente. Tengo por ahí leído que ahora la casa es cool y que quiere mudarse allí la gente trendy.
Echad un vistazo en el enlace de Hundertwasser, que tiene muchas cosas que merecen la pena.

Petrusdom dijo...

Esta todo tan cuadriculado y racionalizado que todo que sea asimétrico, curvilineo, irregular es un canto a la imperfección humana.

Saludos cordiales

Noemí Pastor dijo...

Petrus, a mí me han conquistado la curva y el color. Besos.

Dante Bertini dijo...

gracias querida;
rodeado de mediocridad seudomoderna (los últimos parques barceloneses sólo se salvan por la presencia de los árboles)ver este atentado al medio pelo creativo es una gratificación. Ignorante de mí, que además nunca pisé Viena, no lo conocía.

Fernando García Pañeda dijo...

Pues a mí no me parece kitsch. Me parece más bien arquitectura con buena imaginación.
Y, aunque lo fuera, en efecto, sería las dos cosas.

zaga dijo...

Hola Noemi,a mi me parece un collage arquitestonico supervisual y megahabitable.

Lula Towanda dijo...

Es bonita pero la asimetría me inquieta, no lo puedo evitar

Noemí Pastor dijo...

CACHO, amore, yo tampoco pisé nunca Viena. Me echan patrás las bajas temperaturas y que esté todo carisísimo. Pero algún día será. Beso.
FER,claro, puede ser todo a la vez. Y además, don't forget it, viviendas sociales. Que lo flipas.
ZAGA, voy a ver si miro más detalladamente fotos del interior, porque igual es mejor vivir en la casa de enfrente. Beso.
LULA, a mí precisamente me gusta el arte inquietante.
Más besos, gente.

Möbius el Crononauta dijo...

¿Se pasó Gaudí por allí?

Curioso edificio. ¿Lo apreciarían sus inquilinos?

Noemí Pastor dijo...

Pues sí tiene toques ¿gaudinianos?, ¿gaudinescos? Dejémoslo en "de Gaudí". En cuanto al aprecio, supongo que también habrá qien lo encuentre poco práctico y hasta hortera.

RTHB dijo...

Y ahora que te digo??? He estado en Viena, hace tiempo ya, pero no recuerdo haber visto semejante edificio, creo que la razón es que solo preste atención a la majestuosa Viena clasica.

Un saludo.

Noemí Pastor dijo...

Bueno, Perem, hombre, nunca se abarca todo-todo-todo. Así ya tienes un motivo para volver, que te quedaste sin ver una casa.
Beso.