jueves, 3 de noviembre de 2011

Cuarta crónica de andar por casa sobre la crisis sísmica de El Hierro

Ayer fue un día movidito. Ya os puse que a eso de las ocho de la mañana fue el primer pepinazo gordo, de 4,3, en Frontera. Os puse que había sido de 4 grados, pero luego lo "recalificaron" como de 4,3. Resulta que primero hacen una primera valoración del seísmo y luego tienen en cuenta otras variables y lo redimensionan.

Como sabéis, yo me alojo al otro lado de la isla, en La Caleta, y aquí no se percibe nada.

Salió el día despejado y me subí a Malpaso, el punto más alto de la isla, a 1.500 metros. Luego bajé a comer a El Pinar, hacia el sur, a unos quince kilómetros de La Restinga. Malas noticias: ya no hay  pescado fresco en la isla. Las autoridades recomiendan que no se consuma pescado de la zona afectada por la erupción, pero me temo que es una recomendación vana, porque las embarcaciones no salen a pescar.
Así es el paisaje en la cumbre.

Desde El Pinar hice unas fotos al Teide y a la mancha, que día a día cambia de forma y color.
 El Teide desde El Pinar.

 La mancha desde El Pinar. Ahí abajo, tras ese cono desmochado, está La Restinga.

Más tarde me di un paseo por el Pozo de la Salud, ya dentro de la zona sísmica. A unos kilómetros de la costa, el buque Ramón Margalef, del Instituto Oceoanográfico Nacional, se daba unas vueltitas por el mar y un joven, con un teleobjetivo gigante, lo fotografiaba desde el paseo. Y así de tranquila andaba yo, entre el pozo y el mar, cuando, de repente, en la casa de al lado, una señora se asoma a la ventana medio gritando:

- ¿Lo sentiste? ¿Lo sentiste?

Y una niña aparece corriendo por la calle:

- ¡Sí, sí, mami! ¡Lo sentí!

Me metí en Internet. Daban noticia de un recientísimo seísmo de 3,8. Aproximadamente una hora después, en Tigaday, una periodista de Cuatro hacía su conexión en directo para el informativo de las ocho (las siete en Canarias) y decía que el pepinazo finalmente había sido de 4,4, el más intenso hasta el momento.

O sea, que arreó una sacudida de 4,4 y yo no noté nada. Ni un temblorcillo, ni un runrún, ni un mareo. Nada. De nada.

Cerca de mi casa, en La Caleta, está el cuartel militar Anatolio Fuentes, adonde han llegado refuerzos desde Gran Canaria. Cuando volví a casa, por la noche, me encontré a un hermoso grupete de militares, chicas y chicos, que regresaban andando por la carretera de La Caleta al cuartel. En el barrio solo tenemos dos sitios para cenar, El Rinconcito y el Yesimar, así que en uno o en otro me los encontraré quizás mañana.

En el canal 24 horas de Televisión Española mencionaron una hipotética evacuación (sic) del municipio de Frontera, donde están sucediendo los últimos seísmos. La Wikipedia dice que viven allí más de cuatro mil almas. No es moco de pavo.

Seguiremos informando.

12 comentarios:

humo dijo...

Nena, cómo me gusta tener información de primera mano, antes que los de Público y todos los demás.
Y con fotos de las buenas.
A la próxima me voy a Hierro... Cuando la cosa se despeje.

M. Luz Congosto dijo...

Ya no miro lo que dicen los periódicos, busco en tu blog las crónicas. Una visión apacible de los acontecimientos.

Jabi Basterra dijo...

Sigo pensando que es una suerte tenerte allí y poder ponerle voz a la cara B de este tipo de acontecimientos.
Solo tengo una duda ¿tú qué tal estás con todos estos vaivenes?

Un saludico (un pelín preocupadillo)

Uno dijo...

Tenías que haberte hecho sismógrafa o como se llame eso. Te veo como en las pelis de héroes, todo desmoronándose y tu impasible sin notar nada perfectamente preparada para tomar las decisiones pertinentes.
Fascinante este género de "crónica de andar por casa"que has creado.

Un abrazo

Uno dijo...

Me leo a mi mismo y no comprendo como he perdido la oportunidad de poner "chismógrafa"

Juli Gan dijo...

Impresionantes las fotos. Gracias, Noemí, por contarnos tus experiencias sobre el terreno trémulo.

nineuk dijo...

sesceSi no has notado un seismo de esa escala igual es porque llevas tú más agitación en el cuerpo de la que crees. Habría que preguntar al terremoto si te ha notado a tí. Oye, suerte, yo no estaría ni medio tranquilo alli. ;-)

Peke dijo...

¿Cuándo vuelves? Porque, chica, resulta inevitable preocuparse un poco, por muy tranquila que te veamos.

El jukebox dijo...

Confiesa que te lo estás pasando bien, sobre todo, haciéndonos sufrir. :-))) (pero vuelve enterita, ¿eh?)

Txolarte dijo...

Una información de los medios me tiene perplejo.
Mas o menos viene a decir, que se respira un sano optimismo, pensando que la erupción puede impulsar el turismo.
¿¿¿¿¿???????

Juan Carlos Castaño dijo...

Eres una corresponsal de lujo, pero vuelve pronto, te echamos de menos :)

Noemí Pastor dijo...

Hola TODO EL MUNDO. Os he contestado en la quinta crónica. Besos.