martes, 16 de febrero de 2010

La cinta blanca

Haneke me pone nerviosa, me asalta, me desestabiliza, me asusta (estos niños rubios nórdicos dan más miedo que Chucky), me inquieta. Me encanta. Conociéndolo como lo conozco, me pasé la proyección de La cinta blanca (casi dos horitas) esperando noqueos emocionales, en guardia a ver de dónde me venía la leña, pero, en vez de un porrazo, recibí golpecitos insinuados, verbalizados, velados, que no hieren tanto, pero dejan también poso.

Me gusta de Haneke su peculiar forma de narrar, su modo nada convencional de tratar los tiempos ("ahora alargo esta escena porque me da la gana"), su renuncia a la elipsis (¿elipsis de elipsis?, ¡menudo hallazgo!). Me gusta que desarme el guión para encajar la fábula, lo irracional, lo inexplicable [1], lo que no pretende ser ni siquiera simbólico.

Quiero decir que, aunque al comienzo de la película, la voz en off avejentada del maestro nos presenta el relato como el caldo de cultivo del nazismo, a pesar de la brillante reconstrucción visual, a pesar del exquisito blanco y negro documental y vérité, la historia vale para cualquier pueblo y casi cualquier época, es más literaria que testimonial, más fantástica y de mentirijillas que real. Haneke en realidad no quiere explicarnos los orígenes del fascismo, que ya sabemos que no necesita plantación ni semillas, porque nace, crece y se reproduce él solito en cualquier época y lugar.

Para terminar, me alegro infinito de encontrar entre los productores al valiosísimo Andrea Occhipinti, que me acompañó en mi infancia en las series de televisión y ahora me produce cine europeo que merece la pena. Grazie mille, bello.

Título original: Das weisse Band. Dirección y guión: Michael Haneke. Países: Alemania, Austria, Francia e Italia. Año: 2009.  Interpretación: Leonie Benesch (Eva), Josef Bierbichler (encargado), Rainer Bock (doctor), Christian Friedel (maestro), Burghart Klaussner (pastor), Steffi Kühnert (Anna), Ursina Lardi (Marie Louise), Susanne Lothar (comadrona), Gabriela-Maria Schmeide (Emma), Ulrich Tukur (el barón). Producción: Stefan Arndt, Veit Heiduschka, Margaret Menegoz y Andrea Occhipinti. Fotografía: Christian Berger. Vestuario: Moidele Bickel.




[1] Y cuando escribo "inexplicable" lo escribo en sentido literal, así que, por favor, señoras y señores asistentes a las salas, se lo ruego, por caridad, NO me expliquen la película cuando acaba. Y mucho menos durante. Ya sé que tienen ustedes una interpretación genial y deben compartirla con el mundo, pero a mí NO me interesa. Yo no les obligo a leer estas tontadas que escribo, ¿verdad? Pues vamos a respetarnos.

Technorati tags

27 comentarios:

kweilan dijo...

A mí me encantó. Sobretodo ese clima asfixiante que se va cerniendo sobre una a medida que va avanzando la película. Excelente reseña!

nineuk dijo...

Bueno Noemí, perdona pero voy a explicarte el significado de la película, verás... resulta que es un planeta llamado Pandora... no, mierda...déjalo

Anónimo dijo...

La tengo enlatada, en espera. Puede que hoy caiga, puede que mañana. Me acordaré de vuecencia.

Dante Bertini dijo...

como Kaplan, la tengo en espera...si no se hunde la tierra iré a verla en estos días.

marcela dijo...

!Sabia, que eres una sabia!. Yo también pienso que lo que dice ya lo veré cuando la vea. Y la vi noqueada, pasmada y abrumada. Como tú.
De verla más veces. Un abrazo

Noemí Pastor dijo...

KWEILAN, yo lo encontré asfixiante desde el principio. O mejor, amenazante, desasosegante.

NINEUK, pues mira que la interpretación esa de Pandora igual sí me interesa.

KAPLAN, póngame un comentarito Su Señoría cuando la visione, anda.

DANTE, pues lo mismo le digo, señor Bertini. Seguro que pone usted algo en su blog.

Noemí Pastor dijo...

MARCELA, menos mal que hay más asustadizas como yo en el mundo. A veces creo que soy la única que se acojona con estas cosas.

Manuel Márquez dijo...

Aquí otro, compa Noe, que aún no la ha visto, pero que le tiene muchísimas ganas. El cine de Hanecke, que tan bien diseccionas en tu reseña, me atrae, y mucho, por su capacidad para condensar toneladas de contenido en un envoltorio relativamente convencional (digo lo de relativamente por lo personalísimo de sus modos, vaya...). Ya veremos y contaremos.

Un fuerte abrazo y buen día.

39escalones dijo...

Es la única película del último lustro acreedora de ser denominada con ese calificativo tan desgastado (y generalmente, utilizado con ligereza) que es: OBRA MAESTRA.
Y en cuanto a las explicaciones de lo inexplicable, ¿no estaría MacLuhan escondido tras el cartel de la película?
Besos.

Fernando García Pañeda dijo...

Por regla muy general somos los del género masculino los que siempre buscamos las explicaciones, si es que no las damos.
(La nueva estampita de la derecha, una potxolada)

Jo Grass dijo...

Yo también la tengo en lista de espera porque un gripazo de ordago me ha venido a visitar.

besos

el jukebox dijo...

A mí también me gustó mucho la película, por razones en las que, un par de semanas después de haberla visto, aún sigo pensando.
Pienso que la clave es eso que mencionas tú sobre el pequeños y continuos golpecitos que la peli te va suministrando.

Uno dijo...

Estoy tan de acuerdo contigo que no debería añadir mas pero qué quieres.

Quiero decir que hay personas que si no les das un significado (pongamos germen del nazismo) serio o comprometido o cultural para una obra artística como que no se encuentran. Por eso me parece muy bien que la publicidad les adelante uno pues si no se pasan la peli buscando intención y significado a todo. ¿Por qué se ve al fondo un cencerro?
Y por último, ¿Por qué a mi nunca me acompañó Occipinti a ningún sitio? No es justo.

Noemí Pastor dijo...

MANUEL, pues fíjate que yo creo que es lo anticonvencional lo que inquieta. Ya me contarás.

ESCALONES, gracias al cielo no me compete a mí expedir certificaciones de obra maestra ni de obra ministra, así que ni lo pienso. Lo de MacLuhan fue una genialidad de Allen, que se atrevió a filmar nuestras fantasías, pero el señor Marshall ni se molestaría en contradecir las teorías bobas que escucho. Se pitorrearía y punto, que es lo que debería hacer yo, en vez de cabrearme.

Noemí Pastor dijo...

FER, no lo quería decir, pero es cierto que son los selores los que se sacan de la manga teorías imposibles para impresionar a sus parejas. Y lo peor es que lo consiguen. Las chicas los miramos embobadas con cara de "¡Pero qué listo es mi novio!". Es que las críticas cinematográficas de las señoras suelen tener la profundidad de "Es un poco lenta". Ya ves que no se libra nadie.

Noemí Pastor dijo...

JO, prima, cuídate y prepárate, que el viernes se estrena la de Scorsese. ¡Se nos acumula el trabajo! Bueno, creo que La Cinta estará largo tiempo en cartelera. Que te mejores.

JUKE, qué maravilla cuando una peli te da qué pensar durante semanas; o un libro; o lo que sea. Por polemizar un poco, si me obligaran a elegir, diría que me gustó más "Caché".

Noemí Pastor dijo...

UNO, gracias a dios que no aparece en la cinta ningún cencerro, sólo me faltaba. Va a ser que sí, que Haneke dice eso para que lo dejen en paz, que ya le darían suficiente tabarra con qué significaba "La pianista".
A Occhipinti apenas lo recuerdo en la tele, pero desde niña recuerdo su nombre porque yo no sabía que un tío se podía llamar Andrea y porque el apellido también es chusco. Deberían incluir en la declaración de derechos humanos que nos acompañara un poquico a todas y a todos.

humo dijo...

Eran Ingmar Berman y Dreyer juntos: demasiado para mí ese "déjà vu". Se conoce que ya no estoy para películas de cineclub.

Noemí Pastor dijo...

HUMO, querida, pues a mí no me importa esa resurrección, que aporta un poco de variedad a las monótonas carteleras de provincias. Besos.

el jukebox dijo...

"Qué maravilla cuando una peli te da qué pensar durante semanas; o un libro; o lo que sea". Desde luego. He de decir que el final de la cinta blanca me dejó un poco, así, como raro y tal, pero luego me ha ido convenciendo cada vez más.
Lamento no poder polemizar porque no he visto 'Caché'.

sinseso dijo...

hola noemí.

de esta peli me acuerdo bien, sin haberla visto: es que le ganó el globo de oro a mejor pelicula a "la nana" y yo ahí esperando que catalina saavedra recibiera su premio y me jodí un poco.

lo otro: no sabía que era del mismo dire de caché, que a mi me pareció una excelente pelicula.

ya la veré. recomendación por recmendación: precious.

Noemí Pastor dijo...

JUKE, fíjate que no me acuerdo del final. Oye, tienes que ver "Caché", porque seguro que te gusta. Y si no, para llevarme la contraria.

SINSESO, vaya, lo siento por ti y por Catalina, cuya peli no he visto. Gracias por la recomendación. Seguri que te hago caso.

Besos, pípol.

el jukebox dijo...

Intentaré hacerme con ella.

Lula Towanda dijo...

Me la apunto para la semana que viene. La semana pasada vi a George clooney y me metí de cabeza en up in the air, que hartura de despidos.

Noemí Pastor dijo...

JUKE, ya me contarás.

LULA, a Clooney no lo he visto. Ya digo que se me acumula el trabajo. Y ya me contarás tú también.

Pablo dijo...

El blanco es el color de la pureza.
Es inocencia
Es luz
Es el límite al que tiende la bondad.

Por eso "La cinta blanca" con su pureza inalcanzable.
Es el comienzo y el final de todo lo terrible...

Extraordinario post Noe... (como siempre)
Un beso enorme...

Noemí Pastor dijo...

Gracias, PABLO, muy amable. Creo que la culpa de todo la tiene el blanco y negro.