Había días en que me sentía más inclinada hacia el Periodismo y otros en que me veía filóloga completa.
Al final me decidí por la Filología. Y no me arrepiento. Una vez licenciada, tramité las convalidaciones para matricularme en Periodismo, pero no lo hice, nunca me matriculé, y, a pesar, como digo, de que no me arrepiento, tampoco he podido evitar, durante todos estos años, darle a la cabeza y fantasear sobre cómo me habría ido la vida si me hubiera convertido en periodista.
¿Habría sido más feliz? ¿Tendría ahora mejor sueldo? ¿Le habría dedicado más tiempo a mi profesión?¿Me habrían echado a la calle varias veces tras varios EREs?
Ya sé que no hay respuesta. No hay manera de saberlo ni lo sabré jamás. Pero a veces me da por mirar atrás y pensar en que, si pudiera desandar el camino, elegiría quizás otra senda. Y eso me pone un poco tristona.
Pero mira tú por dónde que esto de hacerme bloguera me ha dado la oportunidad de meter las narices, con toda la humildad y las ganas de aprender del mundo, en el periodismo, pues he tenido la suerte, y la sigo teniendo, de poder colaborar en distintos programas de radio y de hacer cositas varias en periodismo digital.
Así, en mayo de 2013 mis peripecias blogueras me llevaron a integrarme en el blog Doce Miradas. Me lo propusieron y dije que sí; uno de los mejores síes que he dado en mi vida.
Y hete aquí que, cinco años y pico después, la Asociación Vasca de Periodistas y el Colegio Vasco de Periodismo nos ha concedido uno de los Premios Periodismo Vasco: el premio de Periodismo Digital de 2018.
Otros premiados este año son Carmen Sarmiento, César Coca, la Real Academia de la Lengua Vasca Euskaltzaindia, la Sociedad de Estudios Vascos Eusko Ikaskuntza y Jose Mari Iriondo. Casi nada.
Así que, sin haberme licenciado, poseo una doceava parte de un premio de periodismo.
¿Es como para sacarse la espinita o no?
Los premios se entregan el 7 de noviembre en la Sala BBK de Bilbao. Allí tendremos las doce miradas la oportunidad de expresar nuestro agradecimiento colectivo.
Yo ahora voy a expresar mi agradecimiento personal a todas mis compañeras de Doce Miradas, las que lo fueron, las que lo son y las que lo serán, a todas las personas que han colaborado con el blog y lo han enriquecido, a toda la gente que ha confiado en mí más de lo que yo confío en mí misma y me ha brindado oportunidades y a Julen Iturbe, por contagiarme esta afición bloguera y por ayudarme y acompañarme siempre.
Mila esker denoi bihotzez. Je vous en remercie de tout coeur.