En Ávila aprendo que el misticismo es activismo.
Y me paro a escuchar a una banda de cornetas y tambores que interpreta "My Way".¡Si Frank Sinatra y Sid Vicious levantaran la cabeza!
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En Ávila aprendo que el misticismo es activismo.Y me paro a escuchar a una banda de cornetas y tambores que interpreta "My Way".
y no has tomado su excelente café?
ResponderEliminarpara levitar...
¿Viste la casa de Santa Teresa?
ResponderEliminarNo he estado jamás en Ávila, pero puedo escuchar esa banda paseando sus cornetas y tambores por esa plaza!
ResponderEliminarNiña, yo me he perdido algo...
ResponderEliminar¿Estás haciendo la vuelta a España, o qué?
¿no te pasas por Madrid?
Has despertado mi curiosidad, de pronto Ávila ya no es como oscura. (Dile al alcalde que te debe una!!)
ResponderEliminarBesotes
Avila es precioso.
ResponderEliminarY por cierto si Sinatra y Sid levantaran lal cabeza al mismo tiempo , Frank si cargaría a Sid ipso facto , que menudo cabreo que se pilló cuando este versionó su canción!! Lo que tiene no tener los derechos de autor! ;)
Saludos!!
¿Lee Van Cleef? ¿Sigue siendo ninja?
ResponderEliminarDANTE, claro que he tomado café y me he elevado un palmo del suelo.
ResponderEliminarLULA, esta vez no. La vi hace años, pero no me importaría repetir pronto.
JO, primi, qué suerte tienes: la vas a descubrir enterita y vas a gozar.
HUMO, nada, un paseíto. Lo siento, no paso por Madrid. Cuando vaya, te aviso.
ResponderEliminarMITA, te encantará Ávila. Yo cada vez que voy la veo mejor. Ya hablo con el alcalde para que me dé un premio.
LEE, de acuerdo, es diviiiina. Y mística, claro. Y surrealista: Sinatra y Vicious caminando por sus calles.
JULIÁN, a ver si te contesta.
ResponderEliminarIgual no dejo de amarte, No. A ver cuándo, en tu recorrida bestial, inclinas tu rocín al sur y pasas por Uruguay. Tienes de seguro un vaso de tinto y un pedazo de asado aquí!
ResponderEliminar¿No nos dices nada del famoso polvo de Avila, que tan poco gustó a la Santa?
ResponderEliminarJULIÁn, en cuanto que tenga un ratitico me paso por Uruguay. Sin falta.
ResponderEliminarUNO, sglups, m'as pillao. Yo que me las doy de santera y no sé de qué me hablas. Soy un bluff.
Ya veo que has cambiado la literatura por la geografía. Arrepiéntete: aún estás a tiempo.
ResponderEliminarHLO, no excluyo nada: sólo alterno e incorporo. Besos.
ResponderEliminarActivismo, desde los sufíes, sí señora.
ResponderEliminar¿Y para qué iban a levantar la cabeza? ¿Para pasar envidia?
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ResponderEliminarFer, eso lo he aprendido en el Centro de Interpretación del Misticismo. Allí están los sufíes, of course, junto con Juan Ramón Jiménez y más gente ilustre.
ResponderEliminarMe encanta pillarte.¿O mientes para no hablar de polvos?
ResponderEliminarDice una leyenda, muy probablemente falsa, que cuando Tere de Jesús dejó(o hicieron que dejara) Avila hizo un alto en el camino en una montaña desde la que se divisa la ciudad (hoy hay en el lugar una cruz y um mirador que todo turista con coche visita), se quitó las alpargatas, las sacudió para limpiarlas y entonces lo dijo: "de Avila, ni el polvo."
Pues te juro, Uno, que no conocía el "susedido". Me he tragado la "autobiografía" de la santa y no lo relata, así que provendrá de una biografía no autorizada. En verdad te digo que no creo que la santa quisiera tan poco a su ciudad. Besos.
ResponderEliminarTengo pendiente ir a Avila. Y mira que tengo motivos para hacerlo, pero van pasando los años y sigue en la carpeta de pendientes.
ResponderEliminarUn saludo.
Perem, yo la veo cada vez más bonita, así que, cuanyo más tardes en ir, más hermosa la verás.
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